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El PRITANIC

Pésimas señales mandan el gobierno de Sinaloa y el PRI con las amenazas en contra de quien fuera secretario general de gobierno en la pasada administración estatal.

Sin distinción de personajes y de partidos, el ejercicio de la política debe conducirse por la civilidad democrática y la búsqueda de consensos, en el privilegio invariable del respeto pleno a la ley.

No es fácil esto último, cierto, pero es condición indispensable en la aspiración y el concepto de una sociedad que debe distinguirse por su universalidad y su pluralidad.

Pero dejémonos de estas complicaciones filosóficas sobre el ser y el deber ser, que es uno de los cuatrocientos mil millones de asuntos en que no pelamos un chango a nalgadas.

Vayamos mejor a los hechos puros, con los pleitos y las divisiones al interior del PRI.

Otra vez, las clásicas cuentas alegres en el tricolor, con la creencia de que ganarán con amplitud las elecciones del primero de julio.

En ese optimismo exagerado y casi de locos, la soberbia, los revanchismos y la venganza, que no podemos admitir como instrumentos del poder emanado del pueblo.

A dónde irá Gerardo Vargas Landeros con su fuerza trébol, esa será una decisión personal ante los ofrecimientos que le han hecho distintas fuerzas políticas, entre las que destaca la de la coalición encabezada por Morena.

Cada propuesta, en medio de los naturales empujones internos tanto a favor como en contra.

Ya veremos si este martes acude al aeropuerto como miembro del comité de recepción de Andrés Manuel López Obrador, con la eventualidad de un anuncio durante el mitin a celebrarse a eso de las once de la mañana, o si terminan sin prosperar los amarres iniciados.

Jorge Abel López Sánchez desistió de sus aspiraciones por la candidatura a la alcaldía mazatleca, con el señalamiento de dados cargados a favor de Fernando Pucheta.

Avisa ayer en su twitter que “somos un gran equipo de guerreros”, que sigue en pie de lucha y no desistirá; sin más detalles del todavía delegado federal de la SEMARNAT.

Acá en Culiacán, el exalcalde Sergio Torres Félix parece que vuelve al redil, con un ofrecimiento en el gobierno estatal.

Cuestionado al respecto, nos dice que “ahí platicamos”, “en la semana”, y ante la insistencia precisa que “de momento no hay nada formal”.

La posibilidad de que ahora sí le cumplan lo prometido, más de un año después, aunque más vale tarde que nunca.

En la aparente emergencia de no hacer más hoyos en la “unidad” tricolor.

Las inconformidades internas, sin embargo, son mayores a las que se conocen.

A las ya expresadas también en Ahome y en Badiraguato, hay otros priístas en la estrategia de la simulación, de hacer como que trabajan por su partido, pero por abajo bolas.

Cargos de elección popular que parecían seguros dejaron de serlo, y otros que ya estaban difíciles se ven ahora punto menos que imposibles para el PRI.

En el ámbito nacional las cosas tampoco andan para presumir, y acabamos de ver el apapacho del candidato ciudadano José Antonio Meade, elogioso con Manlio Fabio Beltrones, quien estuvo cerca de abandonar las filas tricolores, agraviado entre otras cosas por el incumplimiento de varios compromisos que hizo cuando fungió como dirigente nacional de ese partido.

Necio en dar la nota chusca para los memes, el presidente Enrique Peña Nieto diciéndonos lo irritado que lo ponen a veces las redes sociales, con la reiteración de que en otros países se reconoce lo fregón que está siendo su gobierno, y que aquí nos la pasamos quejándonos por los aumentos a la gasolina, la electricidad, el gas, el huevo y un montón de etcéteras más.

Mientras que López Obrador suma y hasta multiplica adeptos, en una carrera que se antoja cada vez más difícil de detener.

De todos los partidos, deserciones rumbo al barco morenista, que parece inevitablemente enfilado a Los Pinos, lo que no evita que panistas y perredistas griten que vuelan más alto que los cocodrilos, y que rebasarán contundentemente al peje, tanto por la derecha como por la izquierda.

En el PRI ni para presumir les alcanza, y la preocupación es la de combatir la percepción social de que se hunden, se hunden y se fueron.

Ya comentaremos en nuestra entrega del miércoles lo que suceda y se informe durante la visita de Andrés Manuel a Culiacán.

 

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