Opinión
¿Deben ser administrados o solo regulados los Sobre Ruedas por el Ayuntamiento?
Los tiempos cambiaron y con ello se deben de ir años de cacicazgo, de enriquecimiento a costillas de la sangre, sudor y lágrimas de aquellos que se acuestan tarde y se levantan de madrugada sin que puedan gozar de servicios básicos como Seguro Social, Afore e Infonavit
Es urgente la necesidad de que el Ayuntamiento tome cartas en la omisión y ambición de unos cuantos líderes a los que les vale “madres” seguir reglas tan simples como la de no colocar puestos ambulantes en zonas de peligro, no obstruir entradas de domicilios y no invadir avenidas principales que impide que los servicios de ambulancia, bomberos y de seguridad lleguen a tiempo a una emergencia.
Por lo anterior, me salta la interrogante si debería el Ayuntamiento administrar y no solo regular los diversos Mercados Sobre Ruedas que operan en la ciudad. Los tiempos han cambiado y con ello, se deben de ir años de cacicazgo, de enriquecimiento a costillas de la sangre, sudor y lágrimas de un sector de la población muy lastimado como lo es el comercio ambulante.
¡Sí señor!, de aquellos comerciantes que se acuestan tarde y se levantan de madrugada y aún con sus largas jornadas de trabajo no logran darles ni la seguridad económica ni bienestar en salud a las ciento de familias que dependen de este rubro, ya que todos ellos carecen de los servicios básicos como son el Seguro Social, Afore e Infonavit.
No obstante de que a pesar de que diariamente se recaudan grandes cantidades de dinero debido a las cuotas (cobro de piso) que se les cobra por permitir la venta de sus productos en la vía pública a los miles de vendedores ambulantes agremiados y no agremiados que forman el grueso de los Sindicatos que existen en la ciudad de Tijuana.
De este dinero poco se sabe en qué es empleado y la finalidad del mismo, de lo que si hay certeza, es que el flujo constante de este efectivo permitiría el acceso a los servicios antes descritos y con ello se elevaría significativamente la calidad de vida no solo del propietario del comercio, sino de toda la familia que dé él depende.
No es una idea descabellada si se plantea con el debido conocimiento y cuidado, sin embargo, esto será muy complicado de lograr, ya que actualmente al comerciante se le ejerce una presión de manera constante y de diversas formas, lo que lo obliga a callar cualquier injusticia que por grande o pequeña trate de exponer ante los gobernantes en turno.
Queda en manos de Juan Manuel Gastélum Buenrostro, la responsabilidad de prevenir que se pierdan vidas inocentes de madres o padres de familia que tienen como única responsabilidad el salir diariamente en busca del sustento que les permita continuar en esta lucha incansable por llevar a nuestros vástagos a un futuro mejor.
Finalmente como dato de estricta estadística multiplicaré 2 mil puestos ambulantes por 30 pesos de este cobro de piso. Nos arroja la cantidad de 60 mil pesos diarios, y si estos son multiplicados por 7, que son los días en que algunos sobre ruedas permanecen en constante actividad, pues ya suman 420 mil que mensualmente se traduce a 1 millón 680 mil pesos.. ¿Se atreve Usted amigo lector en hacer la cuenta anual…?
¡Si es así, no manda el resultado!!