¡Síguenos en nuestras redes sociales!

Internacional

El dolor de un salvadoreño deportado que lo perdió todo tras 20 años en EEUU

Publicado

en

José Maximino Amaya, migrante salvadoreño deportado de Estados Unidos, sale del Centro de Atención a Migrantes Retornados en San Salvador, El Salvador, el 26 de febrero de 2025 (Marvin RECINOS) (Marvin RECINOS/AFP/AFP)

José Maximino Amaya vivió durante 20 años en Estados Unidos, pero de golpe perdió todo lo ganado tras ser detenido y deportado a El Salvador en el marco de la nueva política migratoria del gobierno de Donald Trump.

Amaya, quien vivía en Nueva Jersey y trabajaba en obras de construcción, regresó a su país en un vuelo fletado por Washington el miércoles, junto a medio centenar de deportados.

“Estaba yendo a mi trabajo cuando me pararon” unos agentes de migración y “me dijeron que estaba arrestado”, relata a la AFP este hombre de 50 años, nacido en Delicias de Concepción, un pueblo agrícola situado a 174 km al este de San Salvador.

Había llegado a Estados Unidos en mayo de 2005, pero jamás regularizó su situación migratoria. Para evitar ser detectado -y deportado- simplemente se preocupaba de “portarse bien”, sin infringir la ley.

José Maximino Amaya, un migrante salvadoreño deportado de Estados Unidos, observa cómo lo recibe su familia afuera del Centro de Atención a Migrantes Retornados en San Salvador el 26 de febrero de 2025 (Marvin RECINOS)
Fue detenido el pasado 25 de enero, cinco días después del regreso de Trump a la Casa Blanca, relata Amaya, quien volvió a su país sin ningún equipaje, vistiendo un pantalón gris y camiseta blanca.

Ese mismo día las autoridades estadounidenses arrestaron a su esposa, quien tampoco tenía regularizada su situación migratoria. Ahora ella enfrenta un proceso de deportación, por lo que debería llegar a El Salvador próximamente.

Tres hijos en EEUU

En Nueva Jersey quedaron su automóvil, sus cuentas bancarias y todos los muebles y electrodomésticos de la casa que la pareja alquilaba.

En Estados Unidos también quedaron sus tres hijos nacidos en El Salvador, de 29, 26 y 22 años.

“Quedan ellos solos allá”, pero afortunadamente tienen residencia legal y empleo, dice Amaya.

La consultora en derechos humanos Celia Medrano, excónsul de El Salvador en Washington, considera que “es lamentable el trato y la marginación” que están recibiendo ahora los migrantes en Estados Unidos.

“No se está respetando derechos fundamentales de las personas, se les está tratando como criminales solo por el hecho de ser migrantes”, indica Medrano a la AFP.

Luego de que el avión con los deportados aterrizara en el aeropuerto Monseñor Óscar Arnulfo Romero, ellos fueron llevados en autobuses hasta un centro de atención de la Dirección General de Migración en la capital salvadoreña.

Allí Amaya fue recibido por un hermano, un sobrino y otros familiares.

“Ayudaba a mi papá”

En Estados Unidos viven unos 2,5 millones de salvadoreños, quienes son un sostén importante para sus familias en El Salvador y también para la economía del país centroamericano.

En 2024 El Salvador recibió 8.479,7 millones de dólares en remesas familiares, monto que representa el 23% del PIB, por lo que las masivas deportaciones de Trump amenazan con tener impacto económico en el país.

Amaya enviaba con regularidad dinero a su anciano padre en El Salvador, como miles de otros migrantes.

“Es algo que se siente difícil, porque en parte él era ayuda fundamental para mi papá. No habían otros medios, porque aquí la situación económica no es muy fácil”, dice a la AFP José Adán Amaya, de 41 años, uno de los 11 hermanos del albañil deportado.

“Pesadilla americana”

“Qué nos va a brindar el país” y “qué nos va a brindar nuestro presidente (Nayib Bukele) también”, se cuestiona Amaya ahora que está de regreso en El Salvador. Sin embargo, asegura que no se amilana, pues es “una persona luchadora”.

“Está duro en Estados Unidos […], ya no es el sueño americano, es como una pesadilla americana”, advierte.

Después de efusivos abrazos de bienvenida, el sobrino hace una videollamada con su teléfono celular a Estados Unidos para que los tres hijos de Amaya puedan verlo en El Salvador. Todos estaban muy emocionados.

Terminada la videollamada, Amaya y sus parientes abordaron una camioneta gris y partieron hacia Delicias de Concepción, en un trayecto que demora unas cinco horas.

Con información de Yahoo Noticias

Internacional

✝️ Viernes Santo: Un día que recuerda la muerte… pero celebra el amor

Publicado

en

Este Viernes Santo, millones de creyentes alrededor del mundo recuerdan la crucifixión de Jesucristo, no como una tragedia sin sentido, sino como el mayor acto de amor que transformó la historia para siempre.

Según las Escrituras, Jesús no fue víctima del destino: Él entregó su vida voluntariamente para reconciliar a la humanidad con Dios. Su muerte en la cruz fue el pago por nuestros pecados, una demostración del amor incondicional que Dios tiene por cada persona.

Aunque se conmemora un sacrificio, este día no es solo de tristeza, porque sabemos que la cruz no fue el final, sino el principio de una esperanza nueva. La historia no termina con una tumba, sino con la promesa de resurrección y vida eterna para quienes creen.

¿Quién es Jesús?
Jesús es el Hijo de Dios, el Mesías prometido, quien vino al mundo no solo para enseñar y sanar, sino para entregar su vida en lugar de la nuestra. Su muerte en la cruz no fue una derrota, sino el acto redentor que cambió el destino eterno de la humanidad. Y su resurrección nos asegura que el pecado y la muerte no tienen la última palabra.

Hoy no se llora una derrota, se honra la victoria de Jesús sobre el pecado y la muerte. Es un día para agradecer, reflexionar… y recordar que el amor verdadero se entrega, aun cuando duele.

📖 “Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.” – Romanos 5:8

Continuar leyendo

Internacional

Ascienden a 74 los fallecidos por ataque de Estados Unidos a puerto petrolero de Yemen

La primera economía mundial acusa a los rebeldes hutíes de usar Ras Issa para importar y exportar petróleo de forma ilícita, mientras que la ONU advierte que por ahí llega alrededor del 80% de la ayuda humanitaria

Publicado

en

El Ministerio de Salud hutí elevó este viernes a 74 la cifra de muertos y a 171 el número de heridos en el bombardeo efectuado por Estados Unidos en la noche del jueves contra el puerto petrolero de Ras Issa, en la provincia yemení de Al Hudeida, en el mar Rojo.

“Los equipos de rescate de ambulancias y de protección civil continúan identificando personas desaparecidas y buscando víctimas”, informó el departamento controlado por los hutíes en un breve comunicado.

El Comando Central de Estados Unidos (CENTCOM) aseguró, en un comunicado, que destruyó el puerto de combustible de Ras Issa, controlado por los insurgentes, a quienes acusan de beneficiarse económica y militarmente de estas instalaciones para vender combustible y financiar sus operaciones

Ese puerto, junto con los de Al Hudeida y Salif, recibe alrededor del 70% de todas las importaciones y el 80% de la ayuda humanitaria que entra a Yemen, según la ONU, mientras que Estados Unidos y otros países denuncian que es utilizado por los hutíes para importar y exportar petróleo de forma ilícita.

“Las ganancias de estas ventas ilegales financian y sostienen directamente las actividades terroristas de los hutíes”, sostuvo el Centro estadounidense que, afirmó: “las fuerzas estadounidenses tomaron medidas para eliminar esta fuente de combustible” para los insurgentes “y privarlos de ingresos ilegales que han financiado sus esfuerzos para aterrorizar a toda la región durante más de diez años”.

Los hutíes acusaron a Estados Unidos de incurrir en un “crimen de guerra” por el bombardeo al puerto de Ras Issa.

“Esta agresión completamente injustificada representa una flagrante violación de la soberanía y la independencia del Yemen y un ataque directo a todo el pueblo yemení”, afirmaron los rebeldes en un comunicado.

“El ataque tiene como objetivo una instalación civil vital que ha servido al pueblo yemení durante décadas, con el fin de impedirle recibir suministros esenciales y castigarlo por su postura justa y equitativa en apoyo del oprimido pueblo palestino”, agregaron los insurgentes. 

Los hutíes reiteraron que el ataque contra esta infraestructura es “un crimen de guerra en toda regla, dado que el puerto es una instalación civil, no militar, que sirve a todos los yemeníes y no es el dominio exclusivo de un grupo específico”. 

Por su parte, el ministro de Información del gobierno del Yemen internacionalmente reconocido, Muamar al Eryani, responsabilizó a los hutíes del ataque por “haber transformado esta instalación vital de una salida económica al servicio de los yemeníes a un centro de contrabando de armas y combustibles iraníes y una fuente de financiación de sus actividades terroristas” durante diez años. 

Estados Unidos, por orden del presidente Donald Trump, inició el pasado 15 de marzo una campaña intensiva de bombardeos contra posiciones de los hutíes en el Yemen, con el objetivo de minar las capacidades militares de los rebeldes y prevenir más ataques contra la navegación comercial en el mar Rojo. 

Sin embargo, los insurgentes, aliados de Irán han respondido con ataques contra buques de guerra de Estados Unidos Israel, mientras que han denunciado que alrededor de un centenar de personas han muerto por los nuevos bombardeos estadounidenses.

Con información de Latinus.

Continuar leyendo

Internacional

Un estadounidense secuestra una avioneta en Belice; muere baleado por un pasajero

Un estadounidense secuestró durante casi dos horas una avioneta con otras 15 personas a bordo que iba de Corozal a San Pedro, dos destinos turísticos de Belice

Publicado

en

Un hombre estadounidense secuestró este jueves durante casi dos horas una pequeña avioneta con otras 15 personas a bordo que iba de Corozal a San Pedro, dos destinos turísticos de la costa norte caribeña de Belice, un suceso que acabó con varios pasajeros heridos y el atacante muerto de un disparo de uno de los pasajeros, informaron autoridades.

Chester Williams, comisionado de la policía de Belice y quien informó de los detalles, indicó que el atacante hirió con un cuchillo a tres de los pasajeros y que una de las personas a bordo de la avioneta, que tenía licencia de armas, fue quien disparó al secuestrador, identificado como Akinyela Sawa Taylor.

Luke Martin, un vocero de la embajada de Estados Unidos en Belice, confirmó que el atacante era de nacionalidad estadounidense.

Previamente, las autoridades aeroportuarias de Belice informaron que la avioneta, una Cessna Caravan con matrícula V3HIG de la aerolínea Tropic Air Flight, llevaba 14 pasajeros y 2 tripulantes.

Todos los pasajeros a bordo fueron atendidos por el personal de emergencia. Las autoridades de Belice indicaron que el secuestrador murió.

La emergencia se detectó a las 08:30 horas, tiempo local, y durante las casi dos horas siguientes la avioneta estuvo volando en varias direcciones hasta que aterrizó en el aeropuerto internacional de la Ciudad de Belice en torno pasadas las 10:00 de la mañana.

Belice es un destino muy popular para los turistas estadounidenses, pero todavía no se ha informado de la nacionalidad de los pasajeros o de la del atacante.

Tammy Bruce, vocera del Departamento de Estado de Estados Unidos, dijo a la prensa en Washington que todavía estaban pendientes de los datos que estaban recopilando las autoridades de Belice, pero calificó el suceso de “horrible” y dijo que había sido una suerte no tener que lamentar más muertes.

Con información de El Financiero.

Continuar leyendo

Tendencia

Copyright © 2024 Todos los derechos reservados Blanco y Negro Noticias