Una pura y dos con sal 

Es evidente que la gente ya está cansada, la sociedad sufre de un hartazgo político por los discursos llenos de buenas intenciones

Tijuana BC.- ¡En sus marcas, listos… fuera!, esta semana arrancaron las elecciones federales a diputados y senadores por Baja California, y con ello una extensa jornada de propagandas publicitarias, meetings políticos, jolgorios, tranzas, uno que otro quemado y visitas a las colonias prometiendo el “milagrito de la rosa de Guadalupe”. Pero, ¿Esta vez habrá acción o puro cuento retorcido como siempre?

Es evidente que la gente ya está cansada, la sociedad sufre de un hartazgo político por los discursos llenos de buenas intenciones, pero de cero soluciones; Y la referencia es en los tres niveles de gobierno: federal, estatal y municipal, nuestro país tiene hambre de un cambio y necesidad de una sacudida en los curules repletos de protagonistas de cuello blanco y carteras ensanchadas. 

En nuestro país y en nuestro estado no ocupamos una revolución, simplemente exigimos evolución en toda la extensión de la palabra. De qué nos sirve tener la bandera y el himno nacional más bonito del mundo, si tenemos el peor sistema de justicia penal y tiene más derechos el delincuente que el ciudadano; De qué nos sirve ser la frontera más transitada del mundo, si decenas de colonias sufren de escases de agua, servicio de recolección de basura e inseguridad. Estamos hasta la mad… de discursos con palabras infladas, intenciones huecas, política comprada y candidatos a medios chiles. ¿Acaso es tan complicado interpretar las verdaderas necesidades del pueblo?

La gente está sedienta de candidatos que recorran las colonias y en su caminar terminen con la delincuencia en las zonas más conflictivas; Que porten con orgullo la camisa de su partido pero con honor defiendan los intereses de su pueblo; Que velen por la salud de nuestros adultos mayores pero inviertan tiempo y recursos en la educación pública de nuestros niños; Que gobiernen el presente pero con un plan de visión global hacia el futuro; Que alcen la mano para pedir nuestro voto pero que no les tiemble para tomar una pala y encabezar las campañas de bacheo.

Esperemos que entre todo el tumulto y la vorágine política nos den la grata noticia de un candidato honesto, trabajador, voluntario, responsable y visionario. Veamos qué buenas nuevas nos traen estas contiendas electorales, ¡Y recuerden aspirantes, su reputación está en juego y su palabra puesta en la mesa, háganla valer!